Previews Julio de 1993: superhéroes, pistolones y…. Magic

Ojear el catálogo Previews es uno de los momentos más satisfactorios de cada mes: cientos de tebeos y una buena cantidad de revistas, libros y merchandising disponibles cada mes. Repasar sus más de 400 páginas es ya un ritual desde hace más de 20 años, cuando mi tienda local, Alcalá Cómics, comenzó a aceptar pedidos (via Gigamesh, todo sea dicho).

Pero ya incluso antes, a principios de los 90 ya había tiendas españolas en las que se podían hacer pedidos, y con ellos, se te abría un mundo de tebeos ignotos: desde series de Marvel que nunca publicarían a cosas rarísimas que se autopublicaban aspiratnes a autores.  Y una vez pasada la fecha tope, los catálogos se vendían al curioso que quisiera echarle un vistazo. Así acabaron un buen número de ellos en mis manos, bien comprados de saldo, bien regalados por amigos.

Es un momento tan bueno como cualquier otro para empezar a repasarlos, y si os gusta, lo haremos de vez en cuando. Hoy comenzamos con el catálogo que apareció en Julio de 1993, cuando la fiebre del coleccionismo que propulsaron gente como Todd McFarlane o Jim Lee daba síntomas de agotamiento. Os pido disculpas por adelantado por la calidad de las fotos, pero no tengo scanner y el catálogo estaba impreso de una manera muy barata para abaratar costes: ¡algunas páginas son completamente ilegibles! Dicho esto… ¡vamos a ello!

La doble portada es un buen indicativo de lo que lo petaba en la época: una nueva chorrada de Rob Liefeld y un crossover de Vengadores y X-Men que ya nadie recuerda llamado Lazos de Sangre, que coleccioné: los acólitos de Magneto hacían de las suyas y tenían que unirse para acabar con ellos. No era gran cosa y ya en su momento me pareció una pobre celebración del 30º aniversario del grupo.

Por eso mismo, en el listado de Marvel, uno de los tebeos más destacados es el Vengadores Costa Oeste nº100, con Roy Thomas y Len Kaminsky a los lápices. Se cumplía el 30º aniversario del grupo, pero por lo que veo, fracasaron en su intento de hacerlos más trascendentes, con una serie ya en franca decadencia. Fui un gran seguidor de los West Coast Avengers, pero a estas alturas, la serie había perdido buena parte de su identidad, tras la delirante etapa de Englehart / Milgrom y la polémica etapa de John Byrne. Aquí veo que sale Mefisto, que siempre daba miedo, pero no recuerdo su importancia en la colección. La serie había perdido toda su inercia y en breve sería reimaginada en la muy extrema y 90s Fuerza de Choque.

Los héroes clásicos como Thor o Capitán América estaban en vacas flacas. Incluso Spiderman flojeaba. Pero Marvel UK estaba en pleno apogeo, y por aquí se asoman Dark Guard, de Dan Abnett y Carlos Pacheco, o los primeros números de Motormouth & Killpower y Plasmer, con Pascual Ferry. ¿Alguien los recuerda? Creo que más allá de Death’s Head no trascendieron mucho, aunque aquí los recordamos con cariño por que fue el primer paso de muchos de nuestros autores.

También estaba en su apogeo Marvel 2099, que estaba en general bastante divertidilla. En realidad, el plantel de colecciones es francamente mediocre, repleto de títulos de relleno para ocupar sitio en las estanterías, como ese Daredevil con armadura y cuchillas o Los hijos de la medianoche y sus intentos de hacer terror con autores bastante flojos. Casi que lo mejor que estaba publicando eran Los 4 Fantásticos de De Falco y Paul Ryan. Definitivamente, estaba la cosa muy malita y llegaría a ponerse peor.

Una cosa que destaca: una colección llamada Fire, de dos números de duración, a cargo de un jovencísimo Brian Michael Bendis. Es la primera vez que la oigo mencionar: Publicaba Caliber, que fueron de las primeros en apostar por los cómics de zombies. No recogió los frutos, me temo.

Dark Horse seguía editando cómics de Aliens, Robocop y otras licencias a troche y moche. Pero más sorprendente es la línea ‘Comics from the Spike’, unos tebeos creados por el director de cine Spike Lee destinados al público negro. Este tebeo sirivió de lanzamiento y planteaba una historia de ciencia ficción con comentario social: la historia de unos jóvenes en cuyo entorno comienza a popularizarse una droga capaz de hacerte volar. ¡Literalmente! A los lápices… el mismísimo hermano de Spike, Cinqué Lee. Viendo el arte promocional, creo que el hombre estaba un poco verde y fue un evidente caso de neopotismo.

¡Llegamos por fin a DC Cómics, que sé que lo estamos esperando! Al contrario de Marvel, DC estaba publicando cosas muy chulas. Aunque fueran las series de Vértigo: Sandman, Doom Patrol, Orquídea Negra, Shade The Changing Man... estaban todas en activo.  Lo más destacado en sus páginas es un otros mundos llamados «Superman Speeding Bullets», en el que el cohete de krypton es adoptado por el matrimonio Wayne, y al morir, Kal-El jura vengarse de los criminales como un Batman superpoderoso. JM DeMatteis y Eduardo Barreto se encargaban de ello. Nunca lo leí.

Batman estaba en pleno KnightQuest, la historia ese en la que Bane termina por partir la espalda a Batman y que aquí no se destaca en ningún momento. En lo personal, mis cómics DC favoritos de ese año son las dos colecciones de Legión de Superhéroes: Legion y Legionnaires, que compraba por este mismo catálogo y me traen muy buenos recuerdos. Pero DC optó por destacar ell relanzamiento de los Outsiders, sin Batman desde hace tiempo y con un estilo algo raro a medio camino entre Alan Davis y el rollito Image.

 

Cerramos la parte de DC con el lanzamiento de una colección para Robin, que recuerdo fue publicado aquí. Aunque muchos fans del personaje abogan por su eliminación del , en su día no había duda de que formaba parte del canon de Batman. Tom Grummet siempre me pareció un buen dibujante, y la colección tenía fama de estar entretenida, aunque no lo puedo decir de primera mano porque a mí no es que no me guste Robin… es que no me gusta ni Batman, así en general.

 

Pero seguro que al ver la fecha, lo primero en lo que habéis pensado es en Image… ¡ay, Image! Aún andaban beneficiándose de esos años de bonanza de la industria, a raíz de la burbuja del coleccionismo y del enorme status que aún disfrutaban Liefeld, Lee, McFarlane y compañía. Eran tiempos en los que LOS FLIPAOS dominaban la industria del cómic y el resto pagábamos el pato.

Ese mes apareció un TP del CyberForce de Marc Silvestri (un coñazo supino de serie), números de Savage Dragon (lo mejor con diferencia), Spawn, Stormwatch  y el mencionado Prophet, un héroe futurista del que Liefeld se aburrió pronto, y que contaba en su lanzamiento con el aberrante arte de Dan Panosian, bastante penosion. ¿Anda andará?  El personaje fue resucitado esta década con muchísima mayor fortuna: es un tebeo cojonudo y repleto de imaginación que os recomiendo a todos.

Como curiosidad, Keith Giffen llevaba ya 5 números de una serie llamada Trencher de la que jamás he oido hablar. ¿Estaría bien?

Una buena muestra de lo que triunfaba en la época es el anuncio de la compañía de Lightning Cómics. Todo en ella huele a poochismo, a subidas al carro y a desesperación: la ilustración está rodeada de proclamas como «este tebeo mola!» o «El arte de Kerschl es asombroso». Como para triunfar hay que parecer un triunfador, había que vender la moto a tope, como seguimos haciendo en internet. Así que decidieron tirar una edición limitadísima de solo…  250.000 copias. Sí, estaba, muy lejos de lo que tiraban los nº1 de X-Men, Spawn y demás, pero era una burrada igualmente. ¡Y con portada con efecto de prisma, que no falte! Una visita por ebay nos muestra que el tebeo se vende hoy por MENOS de su precio de portada. Por flipao.

¡El Ultraverso ya estaba por ahí dando vueltas! Fui muy fan de este universo de ficción, del cual aquí no vimos ni la mitad. El personaje emlema de la casa, el héroe Prime, ni apareció por España, para mi frustración, pero me encantaba Ultraforce o la del vampiro albino aquel, Rune. Otra que sí apareció aquí y que debutaba en Julio de 1993 era Firearm, escrito por el gran James Robinson, sobre un detective con un pistolón mítico.

https://www.youtube.com/watch?v=Amj7tzgWtvA

Lo realmente interesante del lanzamiento de Firearm es que vino acompañado por una cinta de vídeo con un episodio piloto de una serie de TV, un movimeitno caro y arriesgado que seguro estaba encaminado a vender derechos de los personajes para TV. El cutre-episodio, que os pego aquí, contenía la primera parte de la aventura, que concluía en ese número 0 del cómic. Tuvo una andadura corta, pero dejó muy buen sabor de boca a los que siguieron la colección.

Y con el Ultraverso pasó lo mismo: Rune o Ultraforce eran tebeos muy divertidos. Por las páginas del catálogo también anda Valiant Cómics, pero sin ninguna novedad destacable: seguían Solar, X-0 Manowar y las colecciones señeras de la editorial.

La última gran editorial que aparece en este Previews de Julio de 1993 es Viz Cómics. Viz fue una de las pioneras en publicar manga, firmando un acuerdo con Shogakukan, y por aquel entonces, era prácticamente la única que ofrecía tebeos japoneses, aunque la mayoría en tebeos de 48 páginas y grapa. La más célebre en aquella época era Ranma 1/2, que estaba dejando a muchos lectores catacrocker, pero por ahí había ediciones de cosas tan majas como Crying Freeman o Alita Ángel de Combate, junto a autores de moda tipo Kia Asamiya.   Y ojito: auténticos tomacos con obras como Sanctuary o Nausicaa.

El  catálogo se complementaba con una sección de libros, revistas y merchandising que me llama poco la atención. Había muchas novelas de Star Trek, eso sí: recordad que la primera mitad de los 90 fue una época dorada para los trekkies, con varias series alternándose en la tele y pelis en los cines de manera regular.

Me llama más la atención la gloriosa y completísima sección con novedades de juegos de rol. En aquella época aún no tenía manera de hacer pedidos, pero hoy se me cae la baba con la selección. FASA publicaba novedades para EarthDawn, Battletech, Darl Conspiracy, Traveller… Hoy día los pediría TODOS. Bueno, no, porque sigo siendo pobre como una rata. Pero al menos una novedad si caería: cosas de GURPS, de Palladium books y un quintal de novedades de TSR para Advanced Dungeons and Dragons que aún publicaba Ediciones Zinco en España .

También se dan cita por ahí White Wolf, a punto de petarlo del todo con el Vampiro, suplementos para Star Wars D6 (el mejor juego que ha habido de esta franquicia)… y atención:

¡ES EL MES EN EL QUE SE PUDO PEDIR MAGIC POR PRIMERA VEZ!

Así es: la noticia más gorda de ese mes no venía del mundo del cómic: Wizards of the coast anunciaba el lanzamiento del Magiz, con un anuncio algo desastroso en el que explicaba como se podía jugar al jueguecito y aclaraba el concepto de «juego de cartas coleccionables», totalmente novedoso y en su día. En estos sobres te podía tocar un Black Lotus, unos Moxes de colores o un Time Travel. El anuncio tampoco era para volverse loco, la verdad. Tenía que darte un pálpito para arriesgarte con el jueguecito loco este.

Por último, camisetas y vídeos. Manga, manga, mucho manga, que en EEUU aún no lo daban en la tele y había que pasar por caja. OVAS de Urusei Yatsura, 3×3 Ojos y Bubblegum Crisis, capitulacos de Robotech, Macross II, Proyecto A-KO y cosas rarunas como Crystal Triangle, un OVA de unos cazatesoros que no tiene mala pinta y que creo que pocos llegaron a ver en su día. Al menos aquí, no recuerdo mención alguna en fanzines y demás.

En fin: como comprobáis por la breve selección, las grandes editoriales ofrecían, básicamente, mucha morralla de características parecidas. Y las otras, pues parecido. Fijaos en este Force y os haréis una idea de lo que estaba intentando de hacer multitud de editoriales pequeñas, que buscaban forrarse. Pero… ¿y la ilusión cuando te llegaba una edición con portada holográfica de Los Nuevos Guerreros?  Si la cosa mejoró o fue a peor la dejamos para futuros Previews.

FORCEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE!!!!!!!!!!!!