Todos flipábamos con malvados como Vader, Vegeta o Kiko Hernández. O con la maldad de los rusos, siempre amenazando la libertad y la paz mundial y a veces, hasta alguna eliminatoria de la Champions. Hasta que Gorbachov se cansó. Aquello del ‘glasnot’ venía a ventilar el viciado ambiente de la URSS. Sting ya andaba preguntándose si los rusos también querían a sus hijos, y el gobierno soviético hacía esfuerzos para parecer más enrrollados a base de actos culturales, conversaciones de paz y demás gestos inútiles de cara al espectador de Informe Semanal. Pero en el afán por lavar un poco la cara del régimen comunista faltaba algo. Algo con el que el ciudadano normal de occidente pudiera identificarse. Algo simple, cotidiano, que un americano medio pudiera disfrutar, y pensar “hey, quizá estos rojos de mierda no sean tan malos después de todo”. Algo como una canción.
Sólo había que fijarse en las tropecientas bandas clónicas que aparecían en la MTV para encontrar la clave: el hair metal, el rock de estadio, de rock de FM. Nada especialmente complicado, para que los (y sobre todo LAS) adolescentes de pueblecitos del medio oeste pudieran marcarse unas buenas air guitars en su habitación mientras soñaban con dejar su asqueroso pueblo para ser actrices / cantantes. Parecido a lo que es aquí el #MyHyV.
Lo cierto es que es que salvo la irrupción de Kruitz en un programa de Tocata, poco sabíamos en occidente (menos en España) del rock ruso: los fans más acérrimos del technopop podían tener algún single de CCCP y poco más. Intuyendo que may había negocio, Stas Namin, antigua rock star soviética (puteada por el régimen, hay que añadir), fue el que tuvo lo vio claro. Reunió a dedo a cinco músicos jóvenes que ya habían tocado con él, capaces de hablar inglés y entre normalitos y guapos (importante). En realidad todos estaban ya tocando con bandas y vendiendo un quintal, pero la posibilidad de petarlo en occidente les debió de parecer más que atractiva. Así que allá se apuntaron los señores.
El proyecto se bautizó con un nombre que recordara a Rusia de manera inmediata, pero poco amenazadora. No era cuestión de llamarla «MIG-17» o «Pacto de Varsovia». Y «El pene de Rasputín» suena demasiado parecido a «La oreja de Van Gogh». Al proyecto le cayó encima el nombre de Gorky Park, el parque Gorky. Imaginaos un grupo de rock español llamado “Tididavo” o “Casa de campo”. Este último aún tendría algo de “punch”, al recordar a las numerosas prostitutas que allí trabajan, pero que na. Que Gorky Park, pues venga, va.
The YouTube ID of HdL6jJiZ3Is is invalid.Namin consiguió rápidamente el beneplácito del partido, y los funcionarios del ministerio de cultura concedieron al grupo un local de ensayo, un buen estudio de grabación y presupuesto y personal para grabar un vídeo y un demo con sonido profesional. Encima tuvieron la suerte de confraternizar con Bon Jovi cuando estuvieron por ahí haciendo el canelo. Con este material bajo el brazo, el grupo se planó en EEUU buscando hacerse notar. Rápidamente, pájaros como Frank Zappa o un astutísimo manager Doc McGhee toman a los ruskies bajo su tutela, soñando con utilizarles como caballo de troya para introducirse en el jugosísimo mercado ruso, donde les esperaban 100 millones de posibles compradores de discos y tickets. O eso creían ellos.
Sus miembros han contado que algunos de los conciertos que la banda realizó en plan ‘showcase’, principalmente para medios y discográficas, fueron algo turbulentos: nunca faltaba el grupo de megapatriotas americanos, muy fans de Águila de Acero y muy poco de Danko Calor Rojo, que increpaba a los músicos, lanzaban botellas a esos “fucking commies” o, directamente, intentaban zurrlarles.
Por si fuera poco, la KGB les tenía un ojo puesto, no fuera que se fliparan con el capitalismo y les diera por desertar o algo así: tenían que reportar a la embajada cada día, o encontrarse con agentes del gobierno soviético allá donde fueran a tocar o a promocionarse. Además tenían la obligación de hacer apariciones de buena voluntad en institutos y universidades para hablar de lo que estaba avanzando la Unión Soviética en cuando a “libertades” se refería.
Eran, efectivamente, FUNCIONARIOS DEL ROCK.
Pero el sacrificio tuvo su recompensa. La discográfica Polygram, la misma que rechazó a Luixy Toledo, les ofreció un contrato. El primer grupo ruso que firmaba con un sello norteamericano. Ardía Twitter.
El single que fue escogido como rompeolas fue Bang! Muy sabiamente, porque lo una onomatopeya así se traducía perfectamente a cualquier idioma, aunque lógicamente, tanto la letra como el vídeo hacían hincapié en el “gimmick” ruso: cánticos de masas proletarias para abrir el tema, unos “da da da” en el estribillo que todo hijo de vecino sabía que significaba, banderas soviéticas y estadounidenses al unísono, amagos de bailes rusos… Todo esto combinado con las habituales tonterías del rock 80s (o del rock, en general): grititos al final, saltos, posturas de flipao, un solo de guitarra espantoso…
Fue precisamente en este instrumento donde el grupo tuvo otra ocasión de promoción: la compañía Kramer (el vecino de Seinfield y sus ideas) aceptó esponsorizar a Gorky Park y fabricó a su solista una espantosa guitarra triangular que recordaba a las balalaikas, un instrumento tradicional ruso que yo tampoco sabía como se llamaba hasta que he escrito esto. Otra manera de seguir vendiendo su particular manera de hermanar culturas. Que sí, pero que no. Que rock, pero que ruso, y que el discursito del final de Rocky IV también había calado al otro lado del telón de acero.
El resto del disco sigue los parámetros habituales de un disco de Warrant o Winger: el single, un tema más durillo para demostrar que rockeaban por aquí, una baladita para las radios (compuesta a pachas con Bon Jovi) por allá. y una versión de algún clásico. En este caso fue del My Generation de The Who, una «cover» medianamente competente, pero que nadie podía creerse en boca de Gorky Park. En un arranque de creatividad, encima les dio por enriquecerla añadiendo unos versos de un cántico popular ruso al final del tema, clamando “álzate, pueblo ruso”.
Te cagas.
Desde luego, Polygram apostó por el disco, produciendo varios videoclips y promocionando fuertemente el disco, aunque fuera paseándoles como monos de feria por shows de lucha libre. Gorky Park fueron relativamente populares en los EEUU, y durante 15 minutos, toda la prensa musical hablaba de ellos. El chiste al principio de Wayne’s World hablando de “grupos de rock rusos”, que ninguno pillábamos por aquí, iba por ellos. Las ventas, eso sí, se quedaron en un “aceptable”: unas 300.000 copias. En pleno 1989, la competencia en ese campo era feroz, con decenas y decenas de conjuntos haciendo música parecida y la MTV y las emisoras de radio saturadísimas de rock para mujeres. Eso sí, su Rusia natal, el disco lo petó y se convirtieron en estrellas.
La treta de Bon Jovi y Doc McGhee tuvo éxito, y si Gorky Park consiguieron poner un pie en el mercado americano, era el turno de que los americanos pudieran tirarse el pisto. El Festival por la paz de Moscú fue el primero de este tipo masivo en suelo ruso. “Quería darles su Woodstock”, comentó el manager. Y de paso, llevarse un buen pellizco, puesto que parece que se vendieron más de 180.000 entradas, a lo largo de dos días para ver a esta alineación, que contaba con 3 grupos rusos (los propios GP y un par de mataos más), uno alemán (Scorpions), uno británico (Ozzy Osbourne) y 4 estadounidenses (Cinderella, Skid Row, Mötley Cüe y Bon Jovi). La música derribando fronteras y tendiendo puentes. Que bonito. Sobre todo para McGhee, que era manager de todas las bandas occidentales que allí concurrieron. Lo que sucedió daría para otro artículo: drogas, choques de ego, chanchullos y varios episodios de vergüenza ajena. Lo normal cuando juntas a tanto drogadicto y alcohólico, como en GH Vip.
Tras tanto tiempo y tanto hacer el bobo por occidente en pos de la perestroika, el cantante Nikolai se cansa y abandona la banda, para centrarse en estar con su familia y tener una carrera en solitario en su país natal. Poco después, la burbuja del hair metal explota, con Kurt Cobain sosteniendo el alfiler que la pinchó. Y por si fuera poco… la URSS se viene abajo y con él, gran parte del atractivo del grupo. Total, que hasta 1992, Gorky Park no lanza su segundo álbum, Moscow Calling ahora con el bajista “Big Sasha” cantando con una considerable voz de rata. El resultado fue la indiferencia en los EEUU, aunque parece que el LP funcionó bien en algunos países europeos, y como no, en la fría madre patria, donde volvieron a conseguir un disco de oro y largas giras, jaleados por groupies de deliciosos rasgos eslávicos.
El resto de su carrera ya entra en lo habitual en estos casos: cambios de personal, alguna muerte desafortunada, proyectos paralelos, disolución, reuniones… Y aquí, en España, no nos enteramos de casi nada de esto, sin MTV, sin el álbum editado en nuestro país y con sólo alguna reseña en la prensa local, ni nos enteramos de la revolución que los GP habían causado… o intentado causar. Musicalmente no nos perdimos mucho, la verdad. Estábamos más ocupados disfrutando de Revolver o Amistades Peligrosas. Ojalá hubieran venido los comunistas a salvarnos.
La anciana palpando a los Gorky Park mientras suben al ring me ha dejado feliz. Si una ancianita los mira con su aprobación, siendo ellos unos rockeros melenudos, y ella una anciana estadounidense, ¡esque son buenos!
Hostia el vídeo en la lucha libre es LA HOSTIA!! Normal que el Nikolai se bajara del barco.
El gran exponente del rock en Rusia fue Kino, fallecido prematuramente. Escucha la de «peremen»
Tampoco decimos lo contrario…. pero desde luego la historia de los GP y su «invasión» de EEUU tiene mucha miga. Gracias por el apunte, investigaré su música
Los Kino son muy grandes, eso es cierto.
Las guitarras Kramer con forma de balalaika que gastaban estos estaban a cuatro perras por ebay hace poco, que sórdidos eran…
Tremendos. Un colega me enseño Bang en el instituto y me fliparon.
Bang! la verdad es que tiene gracia. Pero el disco al completo es un poco ful.
Y una balada, Try to find me, creo que era, que aun me encanta. jaja
Esa también es de las buenas
Ojo que hoy una compañera de clase polaca me ha dicho que existe algo llamado «disco-polo» y ahora me salís con esto. La vida es maravillosa xD
Mitica Moscow’s calling! Dicen que era el tema favorito de Ivan Drago..:D
Por lo que he podido ver, ‘Moscow Calling’ tuvo más tirón en Rusia que el prmer disco
Creo que tenian mas nivel que algunas bandas del genero, Aunque tampoco eran la repanocha. El Alexey belov que comentas que tiene voz ratonil, a mi me recuerda un poco a Joe Elliot de Def Leppard.
Amistades Peligrosas y Revolver… escalofríos. Principalmente este último, Amistades Peligrosas cuando cantan «te voy meter mano» por lo menos tiene su gracia. No ya cuando se ponen en plan, «vamos a arreglar el mundo con nuestra música» que entonces deseas la guerra atómica con todas tus fuerzas.
De Corky Park, no tenía ni idea de que existían, un grupo entrañable.Seguro que hay grupazos por el mundo increíbles que ni sabemos que existen por el hecho de no cantar en ingles ni ser de IUESEI.
Buen artículo.
En el caso de lo GP, mola porque no dejó de ser un proyecto de la perestroika que al final cobró vida. Pero cuando lees en la prensa sus charlitas en institutos de Charlotte te tienen que caer bien.
Revolver es lo puto peor.
Su actuación en el festival de Moscú fue » mítica «.
grandérrimOL
Esas chupas son sensacionales. A un lado, barras y estrellas, al otro, la hoz y el martillo. Y la cremallera el telón de acero. En cualquier país esa prenda rompe el molómetro, pero en los representados, te podrían matar, en cualquiera de los dos, si te ven con ella puesta a la salida de cualquier garito.
Genial concepto, Funcionarios del Rock. Me acuerdo de aquella foto de Zapataro junto aquellas bandas de música, los de la Ceja…
Las chupas son TOTALES! Entre lo molón y lo penoso, por lo pelota.
La música de la unión soviética es curiosa, porque es lo mismo que la de Estados Unidos pero cantando en ruso y menos comercial. A mi me parece que tiene su encanto.
Coincido contigo, Veronica. Tiene su aquel, sí 🙂 Tengo un disco de una cantante llamada Natasha, cantando en español, que me hace mucha gracia
Es imposible hacer una versión tan cutre de My Generation y un videclip tan guapo.
La2 dio el concierto de Moscú con BJ, scorpions y muchos mas….los gallos del cantante de Gorky Park no tienen desperdicio
Creo que tengo por ahí grabado un cacho de la 2, sí… cuando salían Scorpions, por lo menos. Histórico documento.
Yo tengo grabados los dos días pero lo curioso es que en YouTube esta la actuación de GP y el audio es diferente y los temas de Skid Row que en tv se oyen fatal aquí se oyen bien…supongo que el vhs oficial estará editado o que para la tele sacaron el sonido directo de mesa….misterios sin resolver
Por lo visto tuvieron que cambiar el orden de actuaciones en el vídeo. Choques de ego entre Mötley, Ozzy y Bon Jovi!
Pero los verdaderos grandes del metal soviético eran los Aria. Gorky Park eran carnaza MTV. Interesante artículo, me ha molado. https://www.youtube.com/watch?v=cZTXBblmG2w
Escuché algo de Aria antes de escribir y la verdad es que me gustan en su crudeza 🙂 Claro, se quedaron en el mercado interno. Lo que me fascina de los GP es más es su historia de “embajadores enrrollados de la URSS”.
buenisimo articulo viruete¡¡¡¡ que grande¡¡¡ como el podcast de los que iban a petar y les petaron, con vuestro permiso aqui os dejamos uno de nuestros programas, un saludo y seguir asi¡¡¡¡¡¡
http://www.ivoox.com/monografico-voces-femeninas-del-rock-metal-audios-mp3_rf_3979205_1.html
http://www.ivoox.com/monografico-discos-debuts-audios-mp3_rf_3418508_1.html
Lo de Funcionarios del Rock lo padecimos totalmente en la Cataluña de los 90; ay…!
JAJAAJA! Pues no lo había pensado, pero la instrumentalización de la música que se hizo por ahí también tiene tela.
Un poco de decepcionante el artículo, mas que nada por la coletilla del título: «y el metal soviético», y al final solo hablas de los «Gorkys» esos… yo a finales de los 80, antes de que salieran los pollos estos, ya tenía en mi colección un par de cintas de Aria (Ария), que ya tenían su distribución internacional a lo «indie», y cantando en ruso y todo…
Claro, pero la gracia de esto es que en realidad era un proyecto del gobierno para vender el glasnot en los EEUU… Conozco a los Aria y no estaban mal, me gusta su crudeza. Lamento si el titular llama a engaño, pero me hace mucha gracia toda sus historia.
Pepe Luí, eres un superfan!
Y yo!!!
Ya te digo, Mäiz. Bueno, soy fan de lo que representan. El disco es bastante malo!
Recuerdo que ese concierto lo echaron por la 2, lo grabé y lo vi mil veces, estuvo buenísimo! Y los Gorky Park…bueno…eran bastante malotes y el cantante era un corral(por los gallos mas que nada…)!
Antes de Gorky Park se intentó que Kruiz hicieran ese papel de embajadores y por eso salieron en tocata y tocaron en Melilla o algo así, después viéndose lejos de Gorbachov huyeron todos y corrieron a buscar asilo político por ahí.
A mí me gusta este estilo de música (aunque prefiero el AOR mil veces, y en mi novatismo me cuesta a veces distinguirlos bien), pero es que esto que hacen por ejemplo los GP suena tan parecido a otras bandas que no me extraña que la burbuja explotase. Trillones de bandas haciendo lo mismo, vendiendo lo mismo (y muchas bastante mediocres), no puede durar siempre.
Y que algunos estarían ya hartos de tanta pose, imagino. Mucho le echan la culpa al Grunge de la caída de todo ese rollo pero es que yo creo que el primero sólo le dio la estocada final. Más bien diría que el Hair Metal y similares se mataron a sí mismos (COMO MODA) por agotamiento y saturación (puntualizo «como moda», porque no quiere decir que no quedaran bandas, o no sigan saliendo estupendas bandas de Hard Rock/AOR y afines a día de hoy, claro).