¿A qué alturas hubieran llegado los fabulosos O-zone sino se hubieran separado apenas un año después de lanzar su réxito mundial Rumastea, que diga, Dragostea Din Tei? Ni siquiera DJ Syto lo sabe. Pero hay alguien dispuesto a perpetuar el legado y la filosofía musical del grupo: su ex-componente Arsenium, que presentó este verano su nuevo aspirante a repetir las glorias del pluma pluma gay: Rumadai

El tema comienza con la frase más inteligente y honesta que he oído en todo en una canción en todo año: «Hello, I’m Back, with the ruma ruma ruma track». Y de ahí, al infinito. Su letra está construida principalmente en inglés, con toques de moldavo, pero también incluye guiños a otros pueblos amigos: la comunidad hispanoparlante se ve representada con ese «Hola María, you turn me on like sweet sangría». ¡Caliente, burrito, siesta!


Diversas fuentes sitúan el lanzamiento del tema en agosto, pero hasta la semana pasada, no tenía constancia de su existencia. Me temo que si el objetivo era hacer una canción del verano, ha fracasado, a pesar de ser la mejor propuesta que he escuchado este año. Como ven, no se corta un pelo en recordarnos que en el pasado tocó el cielo y que este ese su nuevo ruma ruma, del mismo modo que Dany Mata nos decía este año que llegaba «su nuevo lamento». Por si hay algún despistado por ahí.

Arsenium ha sido el más activo de los tres O-zones tras el desmembramiento del genial trío, participando también en Eurovisión en el año 2006 representando a Moldavia, lanzando un disco en solitario y destacando en el Mira quién baila rumano. Y esto último lo voy a repetir por si no han pensado en el concepto:
Mira quién baila rumano. Y a día de hoy, es nuestro O-zone favorito por su interés en seguir ofreciendo a los fans la misma canción con diferente letra y arreglos una y otra vez, como Hace de Cé o Modern Talking. ¡Salve, Ambrosium, discoteque salutarum!