Recuerdo que cuando en su día pude echar un vistazo a los tebeos de Quicky, el conejo de Nesquick, me parecieron sorprendentemente bien hechos para ser un mero vehículo publicitario (o eso pensaba yo). No estábamos hablando, precisamente, de los Gelatiboys, sino de un caso similar al de los AstroSniks: un tebeo que nace por encargo publicitario pero que gracias al buen hacer de sus autores logra trascender y convertirse en un buen cómic destinado a los pequeños. Como en mi casa somos de Cola-Cao, lo veíamos como un intento a la desesperada. Sin saberlo, estaba más que familiarizado con la obra de su autor, Ramón María Casanyes.

Casanyes, dibujante anónimo de Mortadelo y Filemón, creador de aquellos Paco Tecla y Lafayette del Garibolo (y de aquella historieta porno de Mortadelo), ha colgado en su web un documento en PDF que de imprescindible lectura para todos los fans del tebeo español. 

Aquí encontarán información sobre El sulfato Atómico,  el cambio que supuso A por el niño, sobre la Bruguera de la época, la redacción y lo que era ganarse los cuartos con el cómic en aquella época.  Tras Bruguera y el fracaso del Garibolo (tenéis ahí el anuncio de la tele), se dedicó a labores bastante más productivas que el siempre difícil y, salvo para algunos afortunados, siempre duro e ingrato mundo del cómic en este país.

 Lo vi en El rincón de Mordelón, y si quieren más, como no, pueden acudir a El Foro de la tía. Hala, bajen el PDF, y a leer, y disfrutar.