Hace ya varios meses que terminó
el Mundial de Alemania 2006 y los tertulianos futbolísticos
aún no se ponen de acuerdo sobre si ha sido el
peor Mundial de la historia o si ha sido de los más
competidos, lo cual da una ligera idea de lo mucho que
saben de fútbol estos señores.

Estamos inmersos de lleno ya en la nueva temporada futbolística.
Tenemos Liga, Copa, Champions y UEFA, pero sin
embargo, habiendo tanto fútbol sigue siendo imposible
encontrar un sólo programa televisivo decente.
Los mejores son de pago (Digital+), y de los gratis,
tenemos El Rondo, un programa que pagamos todos
de nuestro bolsillo y cuya calidad dista mucho de ser
la deseada. Un gordo bigotudo bronceado de rayos uva no
es nuestro ideal de presentador. Luego tenemos, o mejor
dicho, teníamos, Maracaná 06, un
lamentable programa deportivo que han quitado por su baja
audiencia, no tan baja como la calidad del contenido emitido.
Tristemente nos queda Antena 3 (cadena que sólo
concibe dos equipos en Champions, el Barça y el
Madrid; al Valencia no lo conocen), con su programa Territorio
Champions, en el cual meten cuñas sobre
si Raúl debería volver o no a la Selección.

El
fútbol también es cultura

Así que aprovechando la coyuntura y mientras
todos los futboleros pregonan en la oficina el ya clásico
‘te lo dije, Italia iba a ganar este Mundial’ y ya vemos
caer a los primeros entrenadores, aquí hemos sacado
a la luz una idea que se fraguó el año pasado
y que de momento había permanecido en la recámara.
Son ya demasiados los gifs sobre el cabezazo de Zidane
que han ido apareciendo por Internet estos meses, por
lo que trataremos de desmarcarnos de esta tendencia nombrando
a algunos de los futbolistas que más nos traumatizaron
en los ultimos años. Como siempre, advertimos que
ni de coña es una lista completa ni pretende
serlo. Es una lista tan personal como puede ser la
suya, y para eso están los comments.

Los
futbolistas, las nuevas estrellas del pop. Algunos.

Spasic

No sabíamos mucho sobre él
cuando llegó a la capital hispana. Un mediocentro
de corte defensivo con capacidad teórica para crear
juego. Este hombre abandonó su país natal
(la antigua Yugoslavia, anterior a la barbarie de Milosevic)
y su antigua profesión, la de policía, y
fichó por el Real Madrid donde jugó la friolera
de dos partidos, marcando en uno de ellos un increíble
gol de cabeza… en propia puerta.

¿El
primo de Chris Peterson?

Prosinecki

También conocido como el eterno lesionado. Sin
duda un gran jugador, de esos a los que se les suele llamar
‘de cristal’ (como Hagi, otro que tal…) por sus contínuas
recaidas. Uno de los habituales de “Al ataque”,
Arús se lo pasaba en grande con él. Se cree
que realmente no era tan débil y que no se lesionaba
tanto sino que era un vago de siete suelas, lo que, unido
a las dos cajetillas diarias de tabaco que se fumaba,
hicieron de él carne de anuncio. Al menos el tipo
tiene sentido del humor. Y no, de los otros del anuncio
no hablamos, que no los imitaba Arús.

Freddy,
como buen tuercebotas, mirándose las botas.

Freddy Rincón:

La historia del gran Freddy en la Iberia es contrapuesta
al todopoderoso Cesar Avgvsto. Fué un "vindi
vini y vidi", porque desde el Calcio (Nápoles
para ser más concretos) lo Vendieron (vindi) a
la casa blanca, luego vino (vini) y se dedicó a
observar (vidi) más que a jugar. Sin fortuna volvió
a Brasil que allí al menos hacía buen tiempo.
Eso sí, para nosotros era inevitable oir su nombre
y pensar en otro Freddy, el único, el del guante
con cuchillas. Años más tarde nos enteramos
de que estuvo en busca y captura por blanqueo (de capital,
nada que ver con Michael Jackson, que eso no es ilegal).

Corporación
dermoestética

Ángel Cuellar:

Militó en el Betis, donde se apoderó de
la banda izquierda, y con esa misma mano llegó
al Barça, pero una grave lesión frenó
su carrera en su debut contra el Valladolid junto al gran
Dragan Ciric. Pasó de ser internacional
a convertirse en el jugador estrella del Racing de Ferrol
o Lugo. Cuando le preguntan por sus actuales entrenadores
en estos equipos, declara que ‘no tienen nada que envidiarles,
les auguro gran futuro de hecho ya tienen gran presente’.
¡Qué importa la cuenta corriente de Cruyff,
Robson o Serra Ferrer!, todos sabemos que cualquier jugador
o entrenador quiere acabar arrastrándose por cualquier
campo de España. Es el único jugador que
conocemos capaz de seguir considerándose una estrella
habiendo pasado de primera a tercera división (aparte
de Jordi Lardín, claro).

Randy Delucchi

El primer FIFA de todos, el FIFA 94, era un juegazo.
Sin embargo, a diferencia de los actuales, y a pesar de
tener la licencia, no nos permitía jugar con jugadores
llamados como los verdaderos componentes de los equipos.
Afortunadamente, diría yo. Por ello, los programadores
se inventaron nombres para los integrantes de las selecciones
virtuales, y en la española destacaba el delantero
Randy Delucchi. Sus goles le hicieron tan popular
que en mi casa dio lugar a una alegre melodía,
a ritmo del Baby I love your way de Big Mountain,
de moda aquel verano: "uuuuh, Randy Deluchhi síi…
siempre sí, nunca no". Luego nos enteramos
que había un Randy DeLucchi que trabajaba en Electronic
Arts, aunque no en este juego, y sus compañeros
hicieron la gracia poniéndole como jugador. Menos
mal que hoy puedes cambiarle los nombres a los jugadores
(en algunos) y poner a tu equipo con nombres de Pokémon.

Chandal
hecho con retales de la ropa de OT1

Mono Montoya:

Este portero colombiano llegó a España
como un grande. Vino consagrado desde Boca Juniors, donde
se había ganado una gran fama como para-penaltis,
como Ed Warner. Aquí no solo no paró
ni uno sino que fue de los porteros mas goleados, sino
que ganó otra fama bien distinta, ya qu, equipo
por el que fichaba, equipo que bajaba a segunda (como
Flippy con los programas). Esto le sucedió tanto
en el Extremadura como en el Mérida, aunque acabó
en el Tenerife. Adivinen los lectores en qué
división se encuentra dicho club en estos momentos.
Un dato curioso que siempre llamó nuestra atención
fue el apodo. "Mono". No se sabía
si era porque se movía como un mono o porque era
mas feo que un simio, aunque finalmente resulto ser porque
en Argentina llaman así a los ‘cancerberos’. En
su etapa en el Tenerife hubo algo que destacó por
encima de sus propias actuaciones, y no es que fuera un
amante de la poesía (que lo era) sino que su nombre
casi no cabía en el uniforme. Alguien tuvo la idea
de escribir Carlos Navarro MONO Montoya, haciendo que
el nombre ocupara ambas mangas además de la espalda.

Este
sábado vamos al Alcampo y luego al Ikea

Onopko:

Todo lo que sabemos de él es que no usaba peine,
que era un defensa ruso y que jugó en el Oviedo.
Dicen que metía muchos goles, pero de eso se acordarán
los de Oviedo, porque lo que es nosotros…

Los
nacionalismos desintegran España

Rommel Fernandez:

A principios de los 90 el Valencia C.F. andaba a la
caza de un nuevo talento para su -por entonces- maltrecha
delantera. Al parecer, a la secretaría técnica
llegaron dos propuestas: la primera hablaba de un joven
que prometía, era argentino y marcaba bastantes
goles. La otra alternativa era Rommel Fernández,
un jugador que acabó tristemente feneciendo en
un accidente automovilistico después de haber sido
cedido al Albacete. El nombre del primero era Batistuta,
cuyos 200 goles en el Calcio le avalan. El Valencia eligió
bien. Como Tom Selleck cuando rechazó ser Indiana
Jones.

Unos años mas tarde el propio equipo de la capital
del Turia incorporó a tres joyas nuevas: Poyatos,
Penev y Viola. Una delantera de cojones.

El
parecido con Milli Vanilli no acaba en el pelo

Karembeu

Sin duda un jugador curioso. Se pegaban por él
tanto el Barcelona como el Madrid, cual Noel y
Ben por Felicity, y finalmente recaló
en el equipo merengue. No era un dechado de técnica,
ni de garra ni pundonor, como suele gustar a los entrenadores,
sin embargo fue un jugador que lo ganó absolutamente
todo en el mundo del fútbol y además, quedaba
de puta madre en las fotos. Las malas lenguas dicen que
fue fichado porque su mujer atraía publico a las
gradas y divertía al vestuario. Sea como fuere,
el Real Madrid conquistó una Champions gracias
-en parte- a su gol ante el Borussia de Dortmund,
por lo que los mil kilos que costó su fichaje parecieron
calderilla. Lo cuál no quita que el tío
se pasara su estancia tocándose los cataplines.

Sí
que tiene cara de acudir a una misión o algo
así, sí.

Donato

¿Cómo no vamos a adorar a este crack, que
afirmaba que "lo más importante en mi vida
es mi relación con Dios"? Donato es una palabra
latina, significa ‘regalo de Dios’ y según ciertos
tarots los Donatos poseen un gran talento artístico
y por medio de la estética persiguen sentimientos
mágicos. Todos conocemos la excepción que
cumple la regla, al menos en cuanto a la estética.
Donato Gama Da Silva es todo un mito viviente. Jesús
Gil le dió un bocadillo ("Cuando lo fiché
para el Atleti era un muerto de hambre") y él
hizo el resto hasta los 40. De ese bocadillo sacó
‘força para viví’ y fútbol durante
13 años y 12 partidos como nacional (6 victorias
y 6 empates). En paradero desconocido.

Selección USA del mundial 94

Todos nos reíamos cuando a los EEUU
les tocó organizar aquel mundial. Fijaos como sería
la cosa que entre las celebridades que promocionaban el
evento en los USA había gente del calibre de Andrew
Shue, Billy de Melrose Place. Pero a la hora
de la verdad, el equipo americano cumplió y llegó
hasta cuartos, cayendo ante nada menos que Brasil. Por
el camino habíamos aprendido a querer a una selección
repleta de jugadores carismáticos: Tony Meola,
Alexis Lalas (que puso mote a más de uno),
el bético Tab Ramos, Cobi Jones (parece
el nombre de un personaje de cómic), Eric Wynalda,
Balboa y su famosa chilena (que no entró)…
Jugar, no es que el equipo jugara especialmente bien,
de hecho su primera victoria fue a costa de la muerte
de un jugador, Escobar, que fue asesinado en Colombia
por meterse un gol en propia puerta, pero cayeron en gracia
y aún les recordamos con cariño.

John
Kerry, en su juventud

Salenko

Oleg Anatolyevich Salenko vino al mundo en 1969 en San
Petersburgo. Después de nacer quiso ser futbolista
y acabó jugando en el Logroñés de
Poyatos, donde marcó 16 goles si no me falla la
memoria. Todo un sueño hecho realidad. Allí
llamó la atención del Valencia CF, equipo
en el cual militó con más pena que gloria
al año siguiente. Todo el mundo lo recuerda como
aquel jugador que marcó 6 goles en el mundial de
1994 (cinco de penalti) en USA, pero nosotros preferimos
acordarnos de él como el jugador que fue expulsado
del Córdoba por gordo. Hoy día Salenko
es parte de las estrellas de la selección rusa
de fútbol playa, junto con otras viejas glorias
futbolísticas de su generación.

Merece
una canción de DJ Syto

Koseski

Este polaco se decía que iba a ser el sustituto
del muy querido por la afición atlética
Paolo Futre. Al final resultó ser un tío
que lo único que hacía era correr que se
las pelaba por la banda, a pesar de tener poco control
del balón y escaso acierto ante la portería.
Tras un par de temporadas se largó por donde vino
sin ganar nada. Entre tanto tuvo tiempo de llorar a moco
tendido ante los micrófonos de José María
García a causa de los abusos de la “mafia
arbitral”, que una vez más había perjudicado
a los colchoneros. Ah, decía que era rockero y
tenía un grupo. Por su mullet y pendientito nos
lo imaginamos parecido al que tenía el tío
Jesse en Padres Forzosos. O eso,
o de versiones de Scorpions. Ahora es diputado.

Pincha
para ver un ilustrativo video

Busquets

Posiblemente, nuestro portero favorito de la historia
(al lado de Tony Meola). Busquets vestía
como un portero de balonmano, con chándal largo,
lo cual no favorecía su espigada figura en absoluto.
De hecho, Cruiff le obligó a vestir de corto,
además a comenzar a usar catalán en su día
a día. A pesar de su presencia desangelada, se
le suponían buenas cualidades. Sin ir más
lejos, parecía jugar bien con las piernas, algo
imprescindible en el fútbol del futuro, nos aseguraban.
Lástima que en el fútbol del presente, bueno,
pasado, le metieran goles tontísimos por creerse
líbero. Una vez se quemó las manos planchando,
o salvando a su hijo de una plancha, según la versión
(la de la calle o la del Marca) lo cual quizá explica
su obsesión por jugar con los pies. Aún
así, era fue casi indiscutible durante un tiempo.
Recordemos que su suplente era Lopetegui. Ay, si
es que sólo de porteros nos sacábamos un
top de lo más majo: Porteros que nos traumatizaron.

Antes
de internet había fanzines sobre cualquier
tema, también de deportes.

Morales

Morales era un chavalillo que jugaba en el Real Madrid
B al que un día se le apareció la virgen
y la oportunidad de jugar en el Real Madrid en un siempre
importantísimo partido contra el Depor. La diosa
fortuna se le apareció y consiguió meter
un decisivo gol, que repitió contra el eterno rival,
el Atleti. El Marca, siempre dispuesto a crear
fenómenos de dónde no hay nada, no tardó
en encumbrarlo como una joven estrella predestinada a
seguir los pasos de Pelé. Lo que pasa es que a
este le pasó como a Scott de Sensación
de vivir, que a los pocos episodios (partidos) ya no pintaba
nada en la serie (equipo). No se llegó a suicidar,
pero al poco tiempo ya estaba por esas segundas divisiones
de Dios.

¿Nos
vamos luego de vinillos?

Javi Moreno:

Javi parecía que lo tenía todo de cara.
Mientras militaba en Alavés, estaba en boca
de todos, logrando una gran cifra de goles y llegando
a jugar la final de la UEFA. Tras esto, da el salto al
Milán… y no se sabe que le pasa que se amuerma.
Tras una lamentable temporada, ficha por el Atleti, donde
tampoco hace nada. Desde entonces va dando tumbos por
diferentes equipos recalando hoy por hoy en segunda B.

Y aquí acaba la primera remesa de futbolistas
viruetiles, aunque probablemente habrá más.
De hecho podíamos ir aventurando algunos de los
que están traumatizando desde ya, por ejemplo,
Torres. O cualquier japonés, que siempre
se caracterizaban por chupar banquillo y afirmar que se
hicieron futbolistas gracias a Captain Tsubasa (Campeones).
Gracias a dios que os tenemos a vosotros, lectores, que
con vuestros comentarios aportáis una infinita
lista: Magui, Secretario, Balic, Ekurza, Korneyev,
Perkovic… Un día de estos tenemos que coger
el PC fútbol y hacer una lista de los que
se supone eran buenísimos y luego eran un pufo.
Porque claro, aquí el único momento en el
que hemos seguido la liga era cuándo jugábamos
al PC Fútbol, eso está clarísimo.
Hoy por hoy solo nos enteramos de cosas como cuando quitan
programas de la tele o los ultrasur llaman mono a algún
negro. UH UH UH UH.